martes, 25 de agosto de 2009

Sobre el acting out


Siempre que estudio el concepto psicoanalítico de acting out, algo se me queda como descolocado, como si no pudiera asirlo del todo. Y sospecho que mis dificultades con él vengan de aquel viejo mito que habla de este evento como la prueba de “una metedura de pata” del analista en la cura.
El término acting out, es tomado del inglés por el psicoanálisis, con toda su resonancia teatral. Describe una acción imprevista (o su narración como escena) que ha realizado un paciente, por lo general, en el transcurso de su tratamiento, y que sorprende tanto al analista como a él mismo. Se actúa un incidente, que luego viene a contarse en sesión, como si fuera una escenificación que quiere mostrarle algo al analista. Es también, el fracaso del trabajo de recuerdo que hace el paciente en su análisis: algo se estanca y en lugar de rememorar, el paciente actúa un episodio.
El acting out estaría asociado entonces a los fenómenos de la transferencia. Así, con frecuencia se estima que cuando aparece durante una cura es porque el analista ha cometido un error: ha señalado algo indebidamente al paciente y éste se la devuelve con un acting out. Una intervención del analista en algún momento dado del análisis ha sido apresurada, desmedida o bastante inapropiada, por tocar inconsideradamente la causa del deseo en el sujeto, y pudiera sobrevenir esta “actuación”.
El acontecimiento en sí tiene carácter de exhibición. El sujeto lo cuenta por lo general como algo asombroso, como algo que él hizo sin saber muy bien por qué. Y en esta escena, tan cargada hacia lo visual, queda implicado casi siempre un objeto jugando un rol protagónico. Lacan cita el famoso caso de Kriss, relatándolo así: un individuo que temía mucho ser un plagiario y su analista trata de convencerle de que no lo es, que ese libro que ha escrito es muy original, esto el paciente no lo refuta, pero inexplicablemente sale del consultorio, va a un restaurant y pide un plato de sesos frescos.
Es una especie de mensaje que se le dirige al Otro (al analista, en este caso, quien deberá responsabilizarse por ocupar esa posición) para decirle: “Véalo, no es por ahí la cosa, Ud. no ha interpretado por donde era…”
Toda la escena en el acting out se ha compuesto, inconscientemente, para evitar un monto de angustia. A través de esta pequeña representación el sujeto ha evadido con habilidad (¡el histrionismo del inconsciente!) la enorme angustia que ha podido precipitarse por la intervención del Otro.
Sin embargo, los temidos (por los analistas) acting out durante el tratamiento, advierten e indican que el camino interpretativo seguido en tal caso no debería continuarse. Y que deberían pescarse, con atención, las próximas oportunidades que se presenten para regresar sobre el mensaje que ha traído el acting out a la cura.

6 comentarios:

lapiz y nube dijo...

Que comica la anecdota del supuesto plagiador!! Muy interesante concepto ese de acting out. Son fascinantes las argucias del inconsciente. un abrazo.

Verónica dijo...

Sí, Ernesto. Por eso es que yo creo que el inconsciente, y sus argucias, pueden apasionar tanto. Otro abrazo!
Verónica

Anónimo dijo...

Question en passant :
El acting out del falso plagiario (casi una doble negación), se produce cuando éste va a comerse - y se come - la cervelle fraîche o cuando le cuenta lo sucedido a su errado analista?
Mucho gusto como siempre al leer tus textos.
Saludos eurotropicales,
ELB

Verónica dijo...

Cher passeur Beno, qué inquietante pregunta! El acting out es un tipo de acto que el paciente realiza, y por lo general, es fuera del consultorio pero totalmente dirigido hacia allí, es decir, hacia donde está el analista.
Este es uno de los ejemplos más polémicos (conocido como el caso del hombre de los sesos frescos), para los lacanianos, es paradigmático de acting out, pero para otros, el paciente de Ernst Kris comentó en sesión lo que venía haciendo desde hacía algún tiempo, esto es, merodeando los restaurantes aledaños buscando su plato preferido... (Como ves, el plagio insiste con fuerza alrededor de este caso también)
Mis saludos para ti,
Verónica

E-migrad@ dijo...

Mirá k buen post sobre los acting outs!

Recordando, ahora creo entender el por qué de alguna cara ó mirada que capté en mi ex terapeuta en algunas sesiones cuando comenté algún acting que había protagonizado.

El caso es que me recuerdo llegando a sesión - por aquella época ya era estudiante universitaria y había estudiado el concepto - y decirle, hasta en cierto tono de confesionario: "Che, M.: me mandé un acting." Para luego pasar a contarle el hecho...

Resulta gracioso ahora que - con este post - pude darle una vuelta de tuerca más al tema, jejeje.

Que pases buena semana.

Nos estamos leyendo, E-migrad@

Verónica dijo...

Emigrada, así es, siempre uno sigue su análisis, no?
Con mis saludos y ¡Buen día!
Verónica